Imaginen ustedes, un adolescente de una edad promedio de 18 a 20 años; una persona normal con el título secundario, sin la idea de cursar una carrera. Ahora imaginen que esa persona diga: “Quiero ser un contador famoso, quiero manejar las empresas más grandes del país y no pienso estudiar ni hacer nada por ello”. Delirios puros. Exactamente lo mismo pasa con un tipo que por tener una guitarrita, conocer dos o tres acordes, cree que de la noche a la mañana la va a pegar con una banda. Muchas bandas tuvieron la suerte de que eso pase, pero son el 1% de la cantidad de músicos que hay el mundo. En la música necesitás capacitarte y estudiar para poder vivir en este negocio.
El problema es que este adolescente, a comparación de un músico con estudios académicos (académicos musicales, obviamente), tiene una brecha mucho menor de chances. Y no sólo eso, es bastante probable que el adolescente no conozca el abanico enorme de posibilidades que tiene el negocio de la música. Un estudiante académico de música (sin importar la corriente, ya sea clásica, contemporánea o la que fuere) tiene muchas opciones en donde se puede desenvolver y generar un ingreso -en algunos casos más y otros menos- completamente digno.
• Sesionista: El sesionista es un músico altamente entrenado para tocar en diferentes situaciones. Ejemplo: Una banda de una discográfica está grabando un disco y necesitan un instrumentista para grabar un sólo/sección específica. Una banda internacional (hay muchas bandas nacionales que también contratan sesionistas) viene al país y necesita músicos para que toquen esa noche. Una productora necesita músicos para un evento.
Requisitos: Una lectura de pentagrama lo más ágil y eficiente -tiempo perdido en el estudio de grabación, es plata perdida para una producción-, dominar el instrumento, ser una persona sociable.
Sueldo: Se paga por sesión. No se puede determinar un precio específico, depende del sesionista.
• Compositor/Arreglista: El rol del compositor es bastante obvio, compone obras que después puede vender o puede ser contratado por X empresa para componer una cortina/jingle. El arreglista tiene un trabajo parecido al compositor, salvo que se encarga, sobre algo que ya fue compuesto, de hacer arreglos instrumentales sobre esa obra.
Requisitos: Conocer de forma profunda la armonía y tener creatividad.
Sueldo: Ídem del sesionista. Salvo que el compositor de jingles/soundtracks de películas, puede pactar que se pague el honorario debido + recibir dinero cada vez que sea reproducida la obra (en criollo, cada vez que la gente escucha el tema) o recibe un porcentaje de la recaudación.
• Productor musical: El productor hoy en día cumple roles muy importantes para el impacto que pueda -o no- tener una banda, y generalmente se lo usa en una grabación, así que, voy a hablar de su función en base a una grabación de un disco. El muchacho/a se encarga de todo. Controla que el sonido de la banda sea el correcto, que los equipos que usen sean los que se deban usar para sonar de “X” manera, se encarga de llamar a un sesionista/compositor/arreglista específico en caso que hiciera falta; dirige la banda y supervisa -en conjunto de los músicos- los procesos de grabación (grabación, mix, master).
Requisitos: Conocimientos musicales generales, conocimiento del negocio musical, contactos, ideas, experiencia y buena onda.
Sueldo: El sueldo de productor se puede pactar de diferentes maneras, no hay una manera específica.
• Músico de crucero: ¿Qué tan cool puede ser que te paguen por viajar por el mundo, tocar entre 1 hora y 2 por día y encima no pagar un sólo peso por nada? Es un trabajo hermoso. Obviamente, con los problemas que pueda traer esta labor: vas a estar lejos de tu familia un tiempo, en el medio del mar. Si esto no es problema para vos, dale para adelante.
Requisitos: Muy parecido a lo del sesionista, una increíble capacidad de improvisación y una lectura rápida. Y que no sufras de mareos, si es así, te la regalo.
Sueldo: Generalmente las empresas de cruceros son extranjeras, pagan bien y en moneda de afuera. Además, incluyen seguros de viajero, movilización (avión si es necesario), una habitación, comida y casi cualquier cosa que un pasajero tenga acceso (gym, pileta, cine, etc).
• Músico de banda de covers para eventos: Quizás no es el mejor trabajo ni el más deseado por un músico; pero, ¡hey! es un trabajo y vas a estar viviendo de lo que amás. El trabajo es bastante simple, tenés una banda y te llaman de un casamiento/bautismo/bar mitzvah/evento para tocar. A veces te dan un repertorio, a veces te conocen por ser una banda que toca covers de determinado género.
Requisitos: Tener buena onda, ya que vas a ser uno de los tipos que levante a bailar a la Tía Edemira con sus 98 años (si se rompe algo, mejor que contrates un buen boga).
Sueldo: No es el mejor, pero conozco bandas que están cobrando bastante por presentación. Sino, mirá a los pibes de Agapornis.
• Músico de orquesta / Director de orquesta: Es un trabajo sin duda de élite en este mundo tan “under” que es la música. Es difícil ganar una plaza de músico de orquesta y es el sueño también de muchos. El puesto más alto es el de director/a de orquesta quien se encarga de coordinar los distintos instrumentos que la componen, preparar a los músicos y leer difíciles partituras además de guiar. Luego tenemos a los primeros violines, violas,violonchelos, segundos violines, contrabajos,arpa y piano, organo, flautines, flautas, oboes, corno inglés, trompas, clarinetes, fagots, contrafagots, percusion, timbales, trompetas, trombones, y tubas. Estos son los intrumentos que hay en una orquesta y por ende alguno de ellos en los que hay que especializarse para ser músico de orquesta.
Requisitos: Formación musical, sin duda.
Sueldo: Desconozco. El otro día leí un artículo que el director de orquesta de una sinfónica en U.S.A. hoy en día cobra un estimado de 175.000 USD al año (el sueldo promedio allá, hoy en día es de 47/50 mil dólares al año). Nada mal.
• Trabajos originales: Sacando los ya nombrados, hay miles de trabajos que se pueden hacer si uno tiene creatividad. Hace poco conocí a un americano que estaba trabajando con una empresa en la creación de programas dedicados exclusivamente a la música. El kia, ayudaba a los muchachos/as que desarrollaban el software, explicando, por ejemplo; cuánto dura una figura musical, cómo debería sonar, etc. Otro, fundó una compañía que se dedicaba exclusivamente a crear pistas para karaokes, videojuegos, o pistas instrumentales. La idea es ser original.
Requisitos: Tener una mente capaz para los negocios, aprender y leer mucho del mercado en general, marketing. Ser creativo y desarrollar y explotar alguna idea que no se le haya ocurrido a otro.
Sueldo: Depende de vos.
En resumen, hay muchísimas cosas para hacer, estas no son todas, y hay muchas que todavía no se pensaron. A todo esto, se le puede sumar la docencia particular, que con los precios que se mueve hoy en día, se puede generar un sueldo hermoso. Las chances son muchas. El requisito de todo, es que seas sociable, generes contactos y buena onda. Cuantos más contactos y buena onda tengas, más trabajos te van a salir. Cuanto más y mejor estudio tengas encima, más trabajos te van a salir también.
¡Cuidado! No te quedes sólo con el aprendizaje de un instrumento y lo que te puedan enseñar en un conservatorio. Hoy en día un músico tiene que estar entrenado con varias cosas más, como por ejemplo:
• Conocimiento de las leyes, más que nada, las que protegen tus obras.
• Negociación.
• Algo que puede servir mucho y que varios aprendemos es la programación/diseño web, para lo que sea distribución/presentación propia.
• Grabación, mezcla, mastering y acústica general.
En fin, cuanto más, mejor.
Como diría mi buena amiga Mirtha Legrand: “Como te ven te tratan, si te ven mal, te maltratan”.
Fuente: Ser Universitario
1. Ten pasión por lo que haces. Ama la música por encima de todas las cosas. Demuestra al mundo que te gusta tocar y/o cantar y que no hay nada más importante para ti en estos momentos. ¡Ah! Y no te olvides de que la mayor muestra de cariño hacia la música es respetarla en todo momento.
2. Saca a relucir tu talento. Si no tienes talento, lo tendrás muy difícil para lograr tus objetivos. No todo el mundo vale para todos los trabajos y ser músico no iba a ser menos. Si no cantas bien o si no sabes tocar un instrumento adecuadamente puede que tu lugar no esté aquí…
3. Sé paciente y hazte fuerte en los momentos difíciles. El camino hacia el éxito está lleno de momentos malos, de baches, de problemas y de situaciones que te harán pensar en mandarlo todo a la mierda. No será fácil llegar a la cima y es probable que tampoco lo hagas inmediatamente.
4. Haz buena música, que sorprenda. Parece obvio decirlo, pero si no haces buena música te comerás los mocos en este mundillo tan complicado. Cúrratelo mucho con tus letras, busca un sonido que te identifique y trata de hacer cosas que se alejen de lo habitual. Si te dedicas únicamente a replicar lo que ya están haciendo otros grupos es muy probable que no le intereses a nadie.
5. Cuida tu imagen. En un mundo en el que estamos saturados de información es importante trabajar tu marca (o la de tu grupo) y tratar de tener controlado todo lo que se dice de ti en internet. Intenta huir de los escándalos y las polémicas que alejen el foco de lo verdaderamente importante, tus canciones.
6. Conoce el entorno. De nada sirve ser el mejor músico del mundo si no eres capaz de buscar un hueco en la industria. Antes de hacer el asalto definitivo debes ser consciente de cómo, cuándo y dónde hacerlo. Sobrevivir en esta ‘jungla’ sólo está al alcance de los más fuertes y de los más inteligentes.
7. No saltes al vacío, ten un colchón económico suficiente que te respalde. Es verdad que los músicos más populares ganan mucho dinero, pero antes de llegar ahí han tenido que hacer una fuerte inversión persiguiendo sus sueños. Hace falta tener una cuenta bancaria holgada sobre todo en los comienzos, cuando todo son gastos y los ingresos brillan por su ausencia. Como en cualquier nuevo trabajo, al principio toca apretarse el cinturón para recoger los frutos en un futuro.
8. Déjate asesorar por los que saben del tema. No te aísles en tu proyecto. Sométete a la opinión de otra gente. Pero no sólo de tus amigos, que probablemente te mentirán para no herir tus sentimientos, sino de especialistas en la industria. Haz caso de sus consejos y no te tomes sus críticas de manera personal. Si les has pedido opinión es porque quieres escucharla, sea buena o sea mala. ¡Sólo descubriendo tus puntos flacos podrás mejorar!
9. Llama a la suerte con todas tus fuerzas. ¿Por qué triunfan unos artistas y otros no? Por muchos motivos, pero uno fundamental es la suerte. Estar en el lugar adecuado en un momento determinado o conocer a alguien fundamental en un instante preciso. Si la suerte no se pone de tu lado lo tendrás más difícil. Eso sí, no lo dejes todo al azar: la suerte hay que buscarla.
10. Mantén el contacto con tus seguidores. Una vez que te vaya conociendo la gente es imprescindible que cuides a tu público, pues es el principal responsable de ponerte en tu lugar. A ningún artista llega la fama si no tiene fans detrás apoyándole. Cuida tus redes sociales, aprovecha los conciertos para entablar conversaciones con ellos… Al final lo acabarás agradeciendo.
– Las redes sociales: es lo que todo el mundo usa constantemente. Facebook, Twitter, Instagram, SnapChat… Cualquier lugar en el que haya gente es bueno para intentar ‘colar’ tu música. Nunca sabes de dónde puede surgir un viral que incluya una canción tuya…
– BandPage (BEINPAGE): si necesitas llevar tu música a plataformas como YouTube o Facebook, aquí encontrarás una gran ayuda. Además, con esta herramienta podrás crear tu propia página web, tu tienda online, experiencias con tus fans… y ganar dinero.
– Reverbnation: el punto de encuentro de músicos de todo el mundo. Entre otras cosas podrás contactar con mánagers para ofrecerles tus servicios o con otros colegas de profesión para crear alianzas.
– Kompoz: crear música se ha convertido en algo global. ¿Te imaginas componer una canción con una chica argentina y grabarla con un bajista australiano, un batería ruso y un cantante alemán? Gracias a esta plataforma de crowdsourcing podrás hacerlo realidad.
– StageIt(STEGELt): solo te hará falta una conexión a internet para montarte tu propio concierto online. Y la gente lo tendrá tan fácil como hacer un clic para escuchar tu música.
Fuente: https://buhomag.elmundo.es/musica/triunfar-musica-consejos/